En típico estilo mío – una vez mas, vi venir un reto y me le metí de cabeza – sin hacer muchas preguntas. Ahora, mirando atrás, buscando aprender de la estela, veo que desde muy pequeña aprendí ese modus operandi de mi madre. Repetidamente me acordaba: “al miedo, ponle el pecho”. Mas que todo, fue esa frase la me coloco hace tan solo unas semanas en un avión camino a un destino que no conocía, a pasar varios días con personas desconocidas.
D e s c o n o c i d o – era el hilo común de mi viaje.
Lo se, ha muchos lo desconocido los asusta – y en ocasiones paraliza. Es tan común ese sentimiento de miedo frente a lo que no conocemos, que parecería que formara parte de nuestra naturaleza humana. En realidad, a otros tantos lo desconocido los emociona. Es mas, en algunos casos el sentimiento es tan extremadamente positivo que constantemente están persiguiendo retos para sentir un high.
Si no me crees pasa una tarde observando a niños de 4 años jugando en un parque. Rápidamente veras que hay unos que se montan en cuanto columpio y rodadero se les pase por delante. Mientras otros tan solo observan tímidamente desde la distancia, sin hacer mucho.
Entonces ¿cual es la diferencia entre los asustados (y hay veces paralizados) y los emocionados (y muchas veces hiperactivos)? ¿Que ven los que le ponen el pecho a lo desconocido – que no ven los que se retraen en su caparazón?
- Sorpréndete – Así como los resultados negativos son estadísticamente probables, hay la misma probabilidad para los positivos. Por eso es curioso ver como gran parte de las personas esperan – y se preparan – solo para resultados negativos. Muchos hasta pierden el sueño – literalmente. Entonces los resultados positivos los cogen por sorpresa – como si pasaran por accidente. Sin duda es recomendable anticipar retos y preparar soluciones. También es sabio anticipar victorias y saber aprovecharlas al máximo. En muchas ocasiones serán tu trampolín a otras victorias. Analizar solo lo negativo que puede resultar de una situación desconocida es hacer 50% de la tarea. Considerar los 360 grados de una situación implica también prever resultados positivos – y abrirse a su posibilidad.
- Desaprende – Por su naturaleza, las cosas nuevas, ya sea una blusa, un carro o una obra de teatro, son desconocidas. Aun no las hemos probado o presenciado y por lo tanto no sabemos con certeza que resultara. Desconocemos si la experiencia será positiva o negativa. Sin embargo el común de las personas siente gran emoción (posiblemente mariposas) ante la anticipación de estrenar algo – ya sea un objeto o un evento. Comparan estreno con algo positivo. De la misma forma, es posible transferir ese sentimiento de anticipación y mariposas ante lo desconocido. Es cuestión de desaprender la reacción impulsiva de miedo – y entrenarse a responder de forma racional, con emoción ante lo desconocido.
Con el tiempo comprobaras que la anticipación es definitivamente mucho mas grave que la situación en si. Y que poner el pecho es la única forma de vivir – y trabajar. Veras como aprovecharas mas oportunidades.