(La historia de como se hace un sueño realidad, parte 1)
El 20 de julio del 2012 mi blog cumplirá 4 años de publicación semanal, excepto por las pocas semanas que no he publicado un post. Es decir, llevo comprometida con ustedes, mis lectores, semana tras semana, hace aproximadamente 48 meses. Sin duda un logro importante a nivel personal y profesional. Aun así, considero que escribir este blog no es mi mayor logro como escritora.
Te explico.
Antes de que existiera este blog, me senté durante 14 meses, en mi apartamento en Sydney, a escribir el manuscrito de un libro el cual antes del fin del 2012 será publicado en Colombia por Random House Mondadori y estará disponible alrededor de Latino America.
Eso quiere decir que este blog nació por mi necesidad como escritora de crear un portafolio de escritos y un seguimiento de lectores – el cual pude utilizar para dar mayor relevancia a mi proyecto de libro ante casas editoriales. Lo cual sin duda me ayudo a conseguir un contrato con Random House Mondadori.
¿Y por que estoy contando esto?
Soy consciente que muchos escritores no contarían esto. Sin embargo, en vista de mi naturaleza brutalmente honesta, busco que confíes en mí ya que no te esconderé nada, incluyendo mis motivaciones.
Aclaro que el hecho que una casa editorial del alcance y reputación de Random House Mondadori compro mi manuscrito, aunque es algo que celebro, no lo considero el mayor logro de este proyecto. Haber llevado acabo mi proyecto de libro, desde una mera intención a su publicación, lo es.
Por medio de este post y otros por venir en los meses antes de la publicación de mi libro, entre otros te contare acerca del proceso de escribir un libro; que aprendí; que haría diferente; y que contribuyó para hacer mi sueño realidad.
Empiezo contándote desde el principio del proyecto el cual se dio lejos de una pantalla de computador – y el cual no empezó con un titulo para el libro. Es mas, aun ahora no estoy 100% segura cual será el titulo de mi primer libro. Ya te contare.
Empezó con una intención. La descubrí siguiendo un proceso de auto evaluación (el cual comparto en mi libro) y la siguiente pregunta: ¿Estoy acá para sumar a la sobre población, o para contribuir al mundo?
Siendo que considero que estoy acá para contribuir, el próximo paso fue responder: ¿Cual será mi mayor contribución?
Esa mayor contribución seria la visión de lo que hiciera, cualquier cosa que eso fuera.
Esta la descubrí usando un modelo que adapte de varias teorías de manejo de carreras.
Dividí una hoja en tres columnas:
- Competencias que me distinguen – En esta lista va todo aquello que además de saber hacer, los demás acuden a ti para esta actividad. Es decir, ¿por cuales de tus competencias recibes el mayor reconocimiento? En mi caso, por años, antes de que decidiera escribir un libro acerca del manejo estratégico y sostenible de carreras, amigos acudieron a mí por ayuda para tomar decisiones importantes en sus carreras. Entonces, ¿para que acuden a ti los demás? Presta atención.
- Intereses mas predominantes – En esta columna debes incluir los temas que te atraen y que le hablan a lo mas profundo de tu ser. A algunos es el futbol, a otros la moda, a otros la economía, a otros la cocina. Es decir, si tuvieras un imán interno, ¿cuales temas atraería?
- Fortalezas innatas – Es todo aquello que sabes hacer mas no porque lo aprendiste por medio de la practica, mas bien porque es parte de tu esencia como persona, de tu naturaleza innata. Por ejemplo, se jugar tenis mejor que muchos – sin embargo no nací sabiendo jugar tenis. Me tomo muchas horas de practica (bajo el sol castigador de Barranquilla) para llegar a mi actual nivel de juego. Por otro lado, persuadir a otros acerca de temas en los que creo, es algo que llevo haciendo desde que tengo 4 años – cuando lograba convencer a otros que compraran los mangos que vendía del palo de la casa de mi abuela. Entonces ¿cuáles son esas actividades que sabes hacer mejor que muchos, pero no tienes idea como las aprendiste?
Aquella lista, que aun guardo, me ayudo a entender que mi mayor contribución seria:
Inspirar y empoderar a empleados alrededor del mundo a crear, seguir y triunfar bajo sus propios términos – y como consecuencia ser mejores ciudadanos del planeta Tierra.
Esa se convirtió en mi visión como escritora.
Sabiendo qué quería hacer y por qué lo quería hacer, pase a buscar cómo lo haría. (Sugiero tomes nota mental de ese orden.)
Buscando como llevar acabo mi visión, caí en cuanta que llevo escribiendo desde que tengo 7 años. Mientras los demás niños pintaban, yo escribía. Entonces entendí que debía ser a través de un libro que realizaría mi mayor contribución.
Siendo así, el 1 de febrero del 2008 fue mi último día de trabajo – y el lunes 4 de febrero, a las 8am, me encontraba frente a una pantalla de computador en blanco. Trabajando 5 días a la semana, un mínimo de 8 horas diarias, termine el primer borrador el 8 de mayo del mismo año. El texto final del libro, el cual próximamente podrás tener en tus manos y leer, quedo finalizado en abril del 2009.
Al igual que yo, si sigues el proceso anterior, muy posiblemente descubrirás que haz venido a hacer al mundo, aparte de pagar cuentas de gas, luz y agua.
El punto no es dejar todo atrás para ir a hacer tu mayor contribución. Es posible hacerlo de forma sostenible, abriendo el espacio en tu vida para lo uno y lo otro. Es en la intersección entre tus responsabilidades laborales y tus necesidades personales que esta tu bienestar.
Buena semana.