Lo se, así como hablar de sexo es tabú en algunos círculos, hablar acerca de amor con relación a como nos ganamos nuestro sustento, también recibe miradas de desaprobación de muchos. Sospecho este ultimo tabú origina en la creencia generalizada que predica que el amor nos ablanda y como tal nos torna mas permisivos – y en general menos fuertes. Lo cual sin duda atenta contra nuestra capacidad de ejecutar, defender nuestro punto de vista y en general ser efectivos en el ámbito laboral.
Después de pasar la buena parte de dos años trabajando como voluntaria en la Fundación Sara Modiano para las Artes (Fundación Saramo) – en la cual dedico gran parte de mi tiempo libre desempeñando los cargos de Tesorera y Directora de Comunicaciones (y todera) – descubrí que contrario a la creencia general, trabajar con amor (y por amor) es uno de los rasgos mas poderosos que un profesional puede traer consigo a su trabajo.
Como tú, tengo cuentas por pagar – así es que no estoy predicando abandonar por completo tu actual trabajo para perseguir el amor laboral. Mas bien sugiero que si hoy no estas profundamente enamorado con el trabajo que desempeñas de lunes a viernes – que busques complementarlo con otra actividad que si amas. Por ejemplo, podrías regalarte una vez al mes a una causa en la cual crees. Cual sea tu formula, lo importante es que experimentes sentir amor por una actividad laboral – cambiará como vez el trabajo en general.
Para ayudarte a encender el amor por tu trabajo, aquí comparto algunos tips:
- El amor y el dinero no son mutuamente excluyentes. Es posible trabajar en algo que se ama – y a la vez ganarse el sustento de vida. Piensa en los atletas y músicos profesionales – que son mas bien la excepción que la norma en nuestra sociedad. Quizás lo anterior se debe a la creencia que dictamina que a cierta a edad ‘debemos ponernos serios’ – abandonar la patineta – y buscar como ganarnos la vida. Si en vez nos encaminaran a primero encontrar aquello que amamos y luego pensar en sustento, el panorama seria otro.
- El huevo o la gallina. No hay reglas. así es que aunque hoy trabajes solo por dinero, es posible aprender a amar tu trabajo. Para prender tu interruptor de amor piensa en todo lo que contribuyes por medio de tu trabajo. Puede que no sea a la comunidad inmediata, pero seguramente tu trabajo forma parte de una cadena – que si ayuda a la comunidad. ¿Y que del bien que le aportas a tu familia? ¿Y a tus colegas? Si no logras encontrar que contribuye tu trabajo – quizás sea momento de repensar como te ganas la vida.
- Toma tiempo. Al igual que decirle a otra persona que la amamos es un paso importante en una relación, llegar a amar nuestro trabajo también es un logro importante en nuestra vida profesional. Como tal tomate el tiempo y se selectivo. No te enamores de la primera causa que te pasa por enfrente. Posiblemente descubras que es mas probable enamorarse de una causa en la cual crees – que esta alineada con lo que valoras. Siendo así, antes de emprender tu búsqueda, procura identificar que es importante para ti.
- Hazlo por tu propio bien. El amor es uno de los sentimientos mas intensos en el espectro sentimental de un ser humano. Como tal cuando sentimos amor hacia una persona o causa nuestros niveles de energía incrementan sustancialmente. A mayor energía – y motivación – mayor rendimiento y alcance como profesional. Es decir es mas fácil luchar por una causa que amamos – que por una por la cual nos sentimos indiferente. Esas ganas de luchar es lo que te tornan en un profesional excepcional – lo cual al fin del día beneficia tu carrera.
- Trabaja por aprender, no por ganar dinero. Al iniciar mi trabajo enla Fundación Saramo temía que añadir una actividad más a mi lista de tareas me quitaría energía y además tiempo para hacer otras actividades mas productivas y lucrativas. Para mi absoluta sorpresa descubrí que aunque no gano dinero, gano otras cosas que mi trabajo por el cual si me pagan no me aporta. Además, buena parte de las competencias que he aprendido trabajando enla Fundación Saramo sin duda han mejorado mi desempeño en mis otros trabajos. Ábrete a la misma posibilidad.
- El amor no es sinónimo de fácil. Si te vas a lanzar al ruedo y hacer un trabajo por amor, asegúrate que sea algo que te rete. Cuando te sales de tu zona de comodidad, como lo hice yo desempeñando dos cargos que eran nuevos para mi – las probabilidades de que aprendas algo se suman a tu favor. así como muchos pagan para sacar una Maestría – y de esa manera adquirir nuevos conocimientos, trabajar de voluntario también puede contribuir a tu desarrollo profesional. Entre mas diferente sea lo que haces como voluntario a lo que haces como asalariado, mas chance tienes de crecer profesionalmente.
- No se puede comprar. Al igual que en la relaciones interpersonales el amor no se puede comprar, ninguna cantidad de dinero te llevara a que ames tu trabajo. Es posible que un sueldo mas alto mejore tu calidad de vida – pero no confundas esa mejora con amor. Sabrás que haz descubierto el amor en el trabajo cuando no te importe cuanto te pagan por lo que haces. Es decir, cuando realmente amas lo que haces, la actividad no es un vehiculo hacia ganar dinero, es el fin en si. Se que suena idealista, pero así de poderoso es encontrar el amor en el trabajo. Es precisamente la intensidad del sentimiento que lo hace tan poderoso – ya que te llena de tanta energía como para perseverar frente a la gran mayoría de retos. Dicha disposición es poco posible alcanzarla de otra manera.
Buena semana.