Siento miedo. Claro que siento miedo.
¿O piensas que porque escribo un blog acerca de varios temas – entre ellos lo vital que es enfrentar nuestros miedos – no siento miedo? ¿Acaso como crees que sé que es importante enfrentar miedos – en el camino a alcanzar nuestras metas? Simplemente porque lo he vivido con mi propia piel. Por eso es que se.
Entonces hoy me doy permiso de sentir miedo – y de confesárselo al mundo.
Siento miedo de que no alcance metas que me he propuesto y para las cuales he desarrollado planes y estrategias. ¿Que tal si fracaso – aun así después de tanto esfuerzo, dedicación, intención y compromiso?
Que susto ¿ah?
Si, siento susto – también siento mucho gusto.
Me da gusto saber que independiente de los resultados que obtenga – le estoy dando lo mejor de mí a mi vida. Que constantemente estoy buscando vivir con mi mejor versión. Expresando mis fortalezas al máximo, retándome, extendiendo mis límites, aprendiendo sin cesar.
Así sé que, gane o pierda, viví al máximo – y sin arrepentimiento.
Si por otro lado, no lo intento – o si nivelo mis expectativas con mis miedos – aunque alcance esas metas mas bajas – eso solo dejara arrepentimiento. Y jamás descubriré que hay mas allá del borde, cual es mi potencial , o que hubiera sido realmente posible. Jamás. (ouch!)
Entonces con mis miedos y demás defectos abordo – y claro esta con mis fortalezas y demás cualidades – me voy con toda. Así es que puedo garantizar que no me arrepentiré de cómo viví mi vida – esta única que nos han dado.
Cuéntame, ¿que hay mas allá de tu borde?
Buena foto, ah? Gracias flickr