(*Lo único en la vida que viene con garantía son los electrodomésticos.)
Este post fue inspirado por las preguntas y comentarios de uno de mis lectores.
Mi lector me pidió que le ayudara a desglosar aquellas habilidades que debe enseñarle a sus hijos para garantizar que sean exitosos – vaya tarea! Por muy difícil que vi el reto, antes que todo me siento honorada que haya confiado en mí las mentes maleables de sus chiquitos. Siendo así, decidí medírmele.
Vale anotar que nadie nace exitoso – el éxito se crea. Por lo tanto todos lo podemos crear para nosotros mismos.
Y aunque no hay reglas, hay ciertos ingredientes que te darán más control sobre los resultados. Si estuviera construyendo un edificio, esto es lo que pondría en la base.
1. Disciplina – Es el motor del éxito ya que conlleva a la suma de buenos hábitos. (Si no lo crees, piensa en lo que sumaria una serie de malos hábitos)
Tener disciplina es persistir a pesar de momentos difíciles (o dolorosos en el caso de los deportistas). Rendirse es el peor enemigo del éxito. Acuérdate de la última vez que viste a Lleyton Hewitt luchar por un punto. Ser disciplinado es comprometerse a rutinas de práctica para ser mejor cada día. Es posible ser innatamente talentoso – aun así, sin la practica es dudoso que estos talentos conlleven a la grandeza. Piensa en un pianista prodigo. Tener disciplina es someterse a rutinas que cuidan de tu salud mental y física – como dormir ciertas horas y comer ciertos alimentos que te aseguran más energía y claridad mental.
Lo cierto es que las personas disciplinadas no ven su metodología como un sacrificio. La ven como una aliada en su camino hacia el éxito. Tal como no se nace exitoso, nadie nace con disciplina. Siendo así, todos podemos aprender a ser disciplinados. Acuérdate que toma 21 días de práctica para adquirir un nuevo hábito en tu vida. Entonces que esperas para prender tu suiche?
2. Autoconciencia – Aquí no hay lugar para la falsedad. En vez, la autoconciencia va ligada a la integridad ya que implica tener conversaciones honestas con uno mismo. Y entre más brutalmente honestas sean esas conversaciones, más valioso será el resultado. Es por medio de la autoconciencia que logramos reconocer nuestras propias fortalezas y debilidades. Cuando tenemos la capacidad de reconocer aquello que anda mal en nuestro modus operandi, tenemos la oportunidad de mejorarlo. A la misma vez, cuando tenemos la capacidad de reconocer cuando algo esta bien en nuestro modo de operar, es posible hacerlo hasta su máxima expresión. Y entre mas temprano en la vida tengamos esta herramienta, mejor será. Entonces como se enseña? Poniendo el ejemplo. Son los padres en contacto consigo mismo que criaran hijos en contacto consigo mismos. Así que como padre (o madre) pregúntate que tanta integridad tienes hacia ti?
3. Enfrentamiento de miedos emocionales – Aquí hablo de amenazas emocionales (no físicas). Esas que sabotean el éxito de muchos. Como lo es el miedo que sienten muchos antes de llamar al director de recursos humanos para preguntar acerca de una vacancia – entonces no lo hacen. O de hablar en público – entonces lo evitan. O de expresar sus límites a un jefe – entonces son pisoteados (por ellos mismos).
Si miras a tu alrededor, la mayoría de las personas reaccionan ante un miedo emocional tal como lo hacen ante una amenaza física. Huyen, pelean – o mas triste, se paralizan. Son pocos los que paran a mirar sus miedos emocionales en la cara. Son pocos los que usan la razón. Es decir son pocos los que aprovechan millones de años de evolución del cerebro humano. Diferente a los demás animales, nosotros, gracias a la estructura avanzada de nuestro cerebro, tenemos la capacidad de reflexionar – el polo opuesto a reaccionar. Por lo tanto podemos hacer uso de razón ante una situación amenazadora. Reflexionar ante nuestros miedos esta muy ligado a la autoconciencia. Lo primero es aceptar que tenemos miedos. Enfrentarlos es el segundo – y muy importante – paso. Siendo así, enseñarle a tus hijos que cuando ven un miedo deben enfrentarlo – no evadirlo, o esconderse o darse auto excusas – los empoderara. Acuérdate que gran parte de ser exitoso es tomar riesgos, es seguir tratando a pesar de un fracaso. Los que no enfrentan sus miedos jamás llegan a eso. Y tu que estas esperando? (no me digas que la Navidad…)
Aun cuando no doy garantías – es mejor vivir la vida, aprender y crecer – que quedarse escondido detrás de la ley del mínimo esfuerzo – que es una de las mejores formas de miedo que ha sido inventada.
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